Si lo que buscan es mágia y energía pura, Ollantaytambo lo tiene, una ciudad inca construida y diseñada por kanchas, suerte de cuadras qua aglutinaban a familias enteras, además de las ruinas de las edificaciones incas más importantes, templos, fuentes, y recintos.

Sin duda quedarse unos días en este lugar es una experiencia única, buenos restaurantes, buenos alojamientos, y sobre todo gente amable y cariñosa dispuesta a compartir su pasado, una alternativa para hacer una visita previa al viaje a Machupicchu ya que está a dos horas de las ruinas y cuenta con una estación de PERURAIL desde donde el pasaje es más económico, situado a tan solo 1 hora y media de la ciudad del Cusco, cabe aclarar que es paso obligado del tren en su ruta hacia el santuario de Machupicchu.

Si buscan tours de tipo místico, pueden realizar rituales de San Pedro guiados por Chamanes o guías espirituales.